jueves, 19 de mayo de 2022

MELONES DE AÑOVER, literatura y prensa (1)

Publico en dos artículos varias menciones sobre los melones de Añover tanto en obras literarias como en noticias de prensa.

El sí de la niñas (Leandro Fernández Moratín), Antonia (Nieves Concostrina), y Un banquete de Castelar (La Noticia Diaria).

Empiezo por la cita más conocida y reconocida por casi todos los

añoveranos, es la que hace Don Leandro Fernández Moratín en su obra teatral de 1806 “El sí de las niñas”, amigo y contertulio de nuestro ilustre paisano Don Casimiro Gómez Ortega.

Dice Rita:

“¡Qué bobería! Desengáñese usted, señorita. Con los hombres y las mujeres sucede lo mismo que con los melones de Añover. Hay de todo; hay que saber escogerlos. El que lleve chasco en la elección, quéjese de su mala suerte, pero no desacredite la mercancía …”

Otra mención literaria es la de la periodista y escritora Dª Nieves Concostrina en su novela de 2014 “Antonia” :

“Juana Herrero era verdulera en la esquina de la calle Santa Isabel con

el pasaje de Doré, esa castiza zona de Madrid encastrada entre Lavapiés, Antón Martín y Tirso de Molina. Allí voceaba sus repollos en temporada, flores por los Santos y pollos en Nochebuena. En verano trasladaba el puesto a Las Vistillas aprovechando que los madrileños repetían año tras año el rito de hacer una merienda con el culo aplastando el fresco de la hierba. Esa atalaya junto al viaducto era inigualable para hincarle el diente a un buen melón recién llegado de Añover de Tajo mientras se contemplaba la ribera del Manzanares con la Casa de Campo al fondo.”

Ahora os voy a ir desgranando algunas noticias históricas:

La noticia diaria : periódico de noticias, anuncios, e intereses morales y materiales: Año II Número 80 - 1895 enero 21  

En su página 3,

En una columna de la sección de “VARIEDADES” y con el título

AUSTERIDADES DEMOCRÁTICAS”, “Un banquete de Castelar”, copio el texto completo de la noticia:

“Vamos hoy a poner a la vista de nuestros lectores una comida del gran tribuno, la comida de Navidad. Después de ella bien podría declamar con pulmones como fuelles de órgano en fiesta mayor, contras las magnificencias y despilfarros del Antiguo Régimen. Vamos sospechando que esos santones de la democracia moderna se sienten con vocación de reyes y a faltan de mejor camino para realizarla toman al pueblo para escabel y la palabra libertad como señuelo. Pero vayamos a la comida, que es suculentísima:

Ostras del Cantábrico

Sopa a la marinera

Arroz con pollo a la alicantina

Lubina de Galicia


Filetes de solomillo con legumbres de Navarra

Fritos variado

Anguilas del Tajo

Menestra aragonesa con jamón, alcachofas y guisantes

Jamón de Trevélez crudo con aceitunas aliñadas de Córdoba y Sevilla

Butifarra en fiambre blanquillo a frito de longaniza

Espárragos de Logroño

Pavo asado y ensalada

Sopas en leche

Empanadas de picadillo de carne y dulce

Tortas de miel, turrones de todas clases, peladillas, mazapán, yemas de San Leandro, cascas de Valencia y almíbares de Granada

Quesos de Burgos, de Asturias y Galicia

Melones de Añover, peras de Ronda, dátiles de Elche, naranjas, granadas, plátanos y piña.

Los vinos, aparte del Jerez y del Pedro Jiménez, era lo único que había


extranjero en la mesa.

El café se lo mandan directamente de Caracas, y los cigarros con que pone término a los obsequios a sus invitados, los recibe de la Habana encerrados en tubos de cristal para que no pierdan nada de su aroma, y en cajas plateadas.

A esto quedan reducidas la austeridades democráticas de los modernos redentores del pueblo, a hablar mucho y a comer mejor.”

 

 Desde luego que los melones de Añover se consideraban uno de los manjares más preciados de España.

Continuará …

Javier Rodríguez Sánchez, hijo de Añover 



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta que nos interesa

Una cueva de Añover a Toledo, y la Cueva de Hércules

Escondido en mi memoria tenía un recuerdo infantil, de esos que empiezan “Dicen que…” , de esos que atraen y al mismo tiempo daban cierto mi...