Ya hemos tenido publicaciones relacionadas con este tema, pero que creo que esta entrada cierra todo lo que sabemos sobre los hidalgos añoveranos y sus escudos nobiliarios (hasta ahora), la aportación es de nuestra colaboradora y amiga Raquel Moreno Carmena.
Publicaciones anteriores:
CASAS SOLARIEGAS DEL SIGLO XVIII EN AÑOVER DE TAJO
El apellido añoverano: CARMENA, por Francisco Javier Sánchez Ruano
Investigando sobre el apellido Carmena, por Raquel M. Carmena
ANTECEDENTES DEL ESCUDO DE AÑOVER DE TAJO
El documento que localizado por Raquel es el BOLETÍN DE LA SOCIEDAD TOLEDANA DE ESTUDIOS HERÁLDICOS Y GENEALÓGICOS - Número 5 - Toledo, 1986
El texto es un extracto del artículo de esta revista sobre la heráldica de pueblos de la Sagra.
LA HERALDICA EN LA SAGRA TOLEDANA (I) por Ventura Leblic y José Luis Ruz
1.- Adosado en la fachada de la casa número 3 de la calle Manuel Escribano se puede ver un escudo de
armas tallado en caliza de no muy grandes proporciones. Se halla acolado a un águila timbrado por un yelmo y con el campo partido:1°.- Un león empinado a un árbol: bordura cargada de ocho
aspas (1)
2°.- Jaquelado.
Son estas armas de la familia CARMENA, que se acompañan de un segundo cuartel con los seis jaqueles de oro y seis de sable del linaje de CUELLAR y ambos se acolan sobre el águila de la familia del AGUILA, tan extendida en la comarca, como veremos más adelante. En 1753 (2) el único hidalgo entre los 1717 habitantes que contaba Añover era un D. Alfonso Ceferino Carmena de 65 años tres más que doña Mariana de Cuellar su esposa, y madre de su único hijo don Francisco, que a sus 34 años aún permanecía
soltero, y morando en la casa paterna, como lo hacían los siete criados que cuidaban de ella y de la saneada hacienda de esta familia.
Don Alfonso Ceferino había obtenido en 1731 el privilegio
de hidalguía sin dificultad alguna por pertenecer a una tradicional familia
-Carmena del Águila y González de Ortega eran sus apellidos completos-. que
habían ocupado los cargos de alcaldes y regidores en la villa de Añover en
donde se habían asentado procedentes de la villa de Carmena, en el partido
judicial de Torrijos.
El linaje de Cuellar fue originario de la villa de su nombre
en la provincia de Segovia; desde donde se extendió a toda la península,
probando su nobleza en la Orden de Montesa (1581) y Calatrava (1676 y 1680).
2.- En el número 11 de la calle Prim coronando una hermosa portada de ladrillo de una antigua vivienda hoy muy modificada y parcialmente desaparecida, se halla un escudo de armas labrado en caliza, timbrado por casco, adornado de lambrequines y con el campo
partido:1°.- Un árbol con dos cabros empinadas al tronco, bordadura
con ocho aspas.
2°.- Partido: 1ª dos lises puestas en palo y dos rosas en
faja y 2° dos sierpes aladas afrontadas y con un tronco de boca a boca y en
orla una cadena. En la bordadura general se lee dificultosamente: HORCASISTAS.
Estas armas son las del linaje de HORCASITAS -de oro con el árbol de sinople y las cabras de sable- que tan
sólo se encuentra representado en el primer cuartel, pues el segundo el de las lises y las sierpes son dos alianzas familiares, la última casi con toda seguridad del linaje de Valdivia; el hecho de colocar la leyenda en la bordura se debe sin duda a una mera necesidad estética para equilibrar la composición.Este linaje originario de Arcentales partido judicial de
Valmaseda en Guipúzcoa se halló establecido en Añover al menos desde el siglo
XVII si bien ya no lo estaba o había pasado a segunda línea el apellido, cuando
se hizo el Catastro de Ensenada a mediados del siglo XVIII, en el que no
aparece reflejado.
3.- Sobre el balcón principal de una antigua casa que lleva el número 2 de la calle Libertad hay uh escudo de armas tremendamente mutilado dejando tan sólo ver parte de los lambrequines, el yelmo, del que sale una
cinta que recogió el lema familiar, y una cruz de Calatrava o Alcántara, indicativa de pertenecer a alguna de las dos órdenes el caballero que mandó colocar el escudo en cuestión.La mutilación consiste en un picado general sobre toda la
talla, que ha borrado del todo el cuartel o cuarteles de que se compuso el
escudo; esta operación se debía generalmente a los cambios de manos de
cualquier propiedad blasonada cuyos antiguos dueños para evitar que su escudo
campeara sobre lo que ya no les pertenecía, ordenaban su desfiguración,
operación mucho más cómoda, que extraer la piedra labrada y volverla a colocar
en otro sitio.
No ha sido posible su identificación, aunque bien pudiera pertenecer esta labra al linaje de ESCRIBANO -jaquelado de oro y gules- de antiguo arraigo en
Añover o al de RINCON -de plata con una cruz floreteada de gules acompañada de cuatro calderas de sable una en cada cantón -linaje de esta villa. También pudiera ser este escudo de algún descendiente de los dos únicos hidalgos que había en la villa en 1575 cuya identidad fue silenciada desgraciad amen te, por los informan tes de las relaciones mandadas hacer por Felipe Il.Por otro lado, la casi seguridad de que ninguna corona
acompañaba al yelmo de este escudo, descarta la posibilidad de que hubieran
sido las del conde de Arcos al que pertenecía el primer diezmo de todas las
tierras de Añover y varios censos sobre casas de la villa.
4.- Sobre el balcón central del nuevo ayuntamiento se han colocado unas armas de granito de labra moderna adornado de lambrequines y timbrado por casco y de un sólo cuartel:
1º.- Un caballero montado y armado. Bajo el escudo la
leyenda: ARMAS DE LA VILLA DE AÑOVER DE TAXO. AÑO 1681.
Tanto las propias armas como la leyenda han sido copiadas de
un antiguo lienzo que preside la sala de sesiones de la corporación, fechado en
1681, cuando apenas habían transcurrido dos décadas de la emancipación de
Añover de la ciudad de Toledo.
Este escudo municipal, con sus mismos colores, es decir, los
naturales, se repite en una vidriera del templo parroquial.
En las relaciones de Lorenzana de fines del siglo XVIII
dicen los informantes que sus armas "se reducen a un Santiago a
caballo", refiriéndose al lienzo antes citado y en el que sólo se advierte
del apóstol el blanco del caballo, pues nada en su actitud, ni en la indumentaria
induce a pensar en santo alguno, lo que sería inexplicable en la interpretación
que de Santiago hubiera hecho cualquier artista del siglo XVII.
La condición eclesiástica del informante, quizás explique la conversión en santo lo que no es sino un caballero. La generalizada anarquía en el uso de la heráldica municipal permitió que al iniciarse el sistema constitucional se adoptarán por armas en los sellos municipales de la villa el escudo de Castilla y León adornado de palmas olvidándose inexplicablemente de las armas tradicionales de la villa.
![]() |
| Anexo del artículo, LA HERALDICA EN LA SAGRA TOLEDANA |



































