Berenguela de Borgoña
y de Plantagenet nace en el año 1179 en Segovia reino de Castilla, hija del
Rey Alfonso VIII de Castilla apodado
el noble y de la Reina Leonor de
Plantagenet, el matrimonio tuvo 10 hijos siendo esta la 1 de todos, por
ello durante los primeros años de vida fue considerada la heredera de la corona
Castellana ya que su hermano Sancho falleció a los pocos meses de nacer y solo
tenía hermanas pequeñas, por ello comenzó a tener una exquisita formación, su
madre Leonor de Plantagenet quiso dar a sus hijos la misma educación que recibió
por parte de su madre: la Reina Leonor de Aquitania (protagonista indiscutible
de muchas novelas, actualmente hay una en la biblioteca de la escritora Eva
García Sáez de Urturi premio planeta 2020. esta reina dejó su estela de mujer
longeva, inteligente, intrépida, culta e insumisa en la historia de las
monarquías europeas. Considerada feminista salvando las distancias, no podemos
caer en anacronismos y valorar con los ojos de la actualidad a las mujeres del
siglo XII pero siendo cierto que Leonor y alguna otra reina plantaron cara a
los hombres y fueron audaces y valientes).
Entonces Berenguela comenzó a recibir la misma formación que
se les daba a los hijos varones, convirtiéndose la princesa y sus hermanas en
unas jovencitas muy preparadas y cultas.
Al ser la heredera al trono comenzaron a surgir muchos hombres pidiendo su mano, entonces su madre la reina Leonor comenzó muy pronto a negociar el matrimonio de su hija primogénita con aquellos candidatos al casamiento. Cuando tenía 8 años (algunos medievalistas dicen que tenía 7) Berenguela quedó comprometida con el Duque Conrado de Suabia hijo del Emperador Federico I, también apodado Barbaroja. Emperador del Sacro Impero romano germánico. Con este compromiso se negociaron buenas alianzas entre el Sacro Imperio y el reino de Castilla aunque no fue del todo bien aceptado por la brutal diferencia de edad de los prometidos. Ella con tan solo 8 años y el Duque 20. Por lo que se tardaría en consumar el matrimonio y traer herederos al mundo. Y al sacro Imperio esto no le venía bien, ellos querían que el matrimonio se celebrara lo antes posible y que llegaran pronto los herederos ya que el emperador estaba muy interesado en que uno de sus hijos reinara en Castilla. Pero claro, la corta edad de Berenguela era un claro obstáculo para asegurar la posición del Duque. Al poco de comprometerse, el reino de Castilla entregó al Sacro Imperio una gran dote por parte de la princesa y el Duque
Conrado viajó hasta Castilla para formalizar el compromiso.
En 1188 la pareja se vio por primera vez en un municipio de Palencia y allí
fueron comprometidos oficialmente además de ser reconocidos como los herederos
de la corona Castellana. Se dice que los prometidos tenían un trato cordial y
que podrían haber llegado a ser un matrimonio feliz, pero antes de que se
celebrase dicho matrimonio la Reina Leonor dio a luz a un hijo varón: Fernando, reconocido como heredero de la
corona, aquel nacimiento fue una gran desgracia para Federico I (Barbaroja)
ya que exigió a su hijo volver de inmediato y romper así el compromiso. Berenguela lloró la marcha de su prometido
al que jamás volvería a ver y sumado a esto el Sacro Imperio además no devolvió
la dote. De hecho la su abuela Leonor de Aquitania ejerció distintas
presiones para que el compromiso de su nieta fuese declarado nulo por parte del
papado para que el Duque Conrado no pudiera reclamar jamás la corona
Castellana.
Como ya Berenguela no era la heredera al trono Castellano, su madre intentó buscarla un nuevo casamiento, pero claro, ya no había tantos interesados en ella y durante algunos años se buscó incansablemente un prometido para la princesa hasta que el Rey Alfonso IX de León se mostró interesado, este había estado casado en primeras nupcias con su prima Teresa de Portugal pero declararon nulo el matrimonio por el parentesco que tenían asique el monarca buscó nueva esposa.
Rápidamente se iniciaron las negociaciones matrimoniales
donde la corona castellana entrega algunos territorios que habían pertenecido
al reino de León, mientras que el rey leonés entregó a su futura mujer
numerosas joyas y algunas poblaciones, además de castillos. Tras todas estas
negociaciones quedaron oficialmente comprometidos y Berenguela inició su viaje
hasta Valladolid junto con un gran séquito, allí la recibió su marido y al poco
de su llegada en 1197 cuando ella tenía 17 para 18 y el 26 se casaron.
Con esta unión se puso fin a la
gran enemistad que había entre castellanos y leoneses. Berenguela se
convertiría en una excelente reina consorte y empezó a ser conocida por ser muy
leal a los intereses de la corona leonesa y a su marido, también se dedicó
plenamente a la religión y a la caridad, además de aconsejar a su marido en
distintos asuntos del reino de ella partió una gran idea como fue la de bajar
los impuestos y reformar algunos monasterios y catedrales. Llegó a ser una reina muy querida por el pueblo, siendo vista como una
mujer muy culta y capacitada.
Continuará ...
Texto preparado por Cecilia Gómez Robles, para el desarrollo de su ponencia “Dos mujeres importantes en la vida de Fernando III “El Santo”, el lunes 7 de marzo de 2022 en el Centro Cívico Manuel Escribano de Añover de Tajo
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